Constitución oficial de CUDI
Los Pinos, 8 de abril de 1999
Versión estenográfica de las palabras del presidente Ernesto Zedillo, durante la ceremonia en la que atestiguó la firma de los Estatutos de la Corporación Universitaria para el Desarrollo de Internet, A.C., entre la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y la Secretaría de Educación Pública, en el salón Manuel Avila Camacho, de la residencia oficial de Los Pinos.
Muy apreciados señores Rectores y Directores de nuestras instituciones de educación superior, tanto públicas como privadas;
Muy apreciados señores representantes de diversas empresas del sector privado mexicano;
Señoras y señores:
Es para mí, motivo de enorme satisfacción el recibirlos, y tener la oportunidad de atestiguar la firma del documento que formaliza la constitución de esta Corporación Universitaria para el Desarrollo de Internet 2.
Este proyecto ha venido concibiéndose de tiempo atrás.
Recuerdo que en varias visitas a diversas instituciones de educación superior del país se me había planteado, en cierto modo, la urgencia de desplegar un esfuerzo de planeación y de organización para que nuestro país estuviese a tiempo, vinculado a esta nueva red que está ahora en proceso de desarrollo, sobre todo en los Estados Unidos, y que conocemos y conoceremos en el futuro como Internet 2.
Considero que no es necesario abundar sobre el significado, la trascendencia de echar a andar, ya de manera formal, de manera práctica, de manera muy organizada, esta Corporación.
Sabemos lo que ha significado Internet para el mundo de las comunicaciones en un principio, pero claramente para el desarrollo de la investigación científica y tecnológica, y hoy en día también para la economía mundial.
Este Internet que hoy muchos mexicanos, afortunadamente, ya usan o usamos, ha significado un enorme avance en las posibilidades de desarrollo en el mundo. Y naturalmente, si ya se vislumbra un enorme salto cualitativo que significará Internet 2 por la velocidad de transmisión y por las posibilidades de interacción que habrán de brindarles a los participantes de esa red, es evidente, es obvio que México no puede estar fuera de Internet 2, y que México tiene que estar a tiempo en Internet 2.
Sin embargo, lograrlo no es tarea sencilla.
Desde el punto de vista tecnológico, habrá de resultar mucho más complejo el estar enlazado a Internet 2, que lo que resultó el enlace con Internet.
De hecho, debemos reconocer que la vinculación a Internet se dio a través de una suerte de generación espontánea. Fue un proceso, hasta cierto punto, anárquico, porque fueron precisamente algunas universidades de nuestro país las primeras que se vincularon a Internet.
Tengo muy presente que la primera vez que oí hablar de Internet y vi una terminal conectada a Internet, fue en nuestra Universidad Nacional, en la Universidad Autónoma de México, en una visita que hacía, hace ya muchos años, a la Universidad, en una de mis varias visitas como secretario de Programación y Presupuesto.
Y la siguiente vez que vi Internet, lo vi en la Universidad de Colima.
Debo --incluso-- reconocer que en aquellos años yo mismo era un tanto cuanto escéptico, producto de mi ignorancia, por supuesto, respecto a lo que ello podría significar para el avance y el desarrollo del conocimiento.
Eramos todavía renuentes a canalizar recursos a universidades que nos presentaban proyectos para financiar la adopción o la vinculación con Internet.
Insistíamos en que había otras cosas más básicas dentro de la Universidad que tenían que atenderse antes que estos proyectos sofisticados.
Hoy, en retrospectiva, reconozco que éramos bastante ignorantes en la materia y que no teníamos claro el enorme potencial que esto extrañaba.
Pero, en todo caso, Internet se desarrolló en nuestro país; pero hoy necesitamos estar vinculados a tiempo con Internet 2.
Esto supone --como decía antes-- requisitos tecnológicos mucho más complejos que Internet y sólo se podrá lograr el cumplimiento de estos requisitos tecnológicos de ingeniería en infraestructura si hay una conjunción de esfuerzos, como la que ahora se plantea en esta nueva Corporación.
Yo estoy seguro que esta empresa habrá de ser exitosa.
En primer lugar, porque a la vanguardia de ella, una vez más están las instituciones de educación superior de nuestro país, pero ahora están de manera coordinada, de manera concertada.
Y algo muy afortunado, es que están participando desde el principio no solamente instituciones de carácter público, sino también instituciones de carácter privado y, dentro de ellas, el Instituto Tecnológico de Monterrey, que --como sabemos-- ha jugado un papel realmente pionero en materia de comunicación e intercomunicación educativa en nuestro país.
Estoy seguro que va a ser un proyecto exitoso también, porque desde el principio están participando muy importantes empresas privadas, que están aportando recursos propios que tienen un valor de mercado muy elevado, pero que con una gran visión los están aportando, porque saben que si estamos a tiempo, esto también va a significar para ellos oportunidades, beneficios, rendimientos muy importantes.
Y estoy seguro que va a ser exitoso, porque también el Estado Mexicano, a través de distintas dependencias, estará participando activamente en este esfuerzo, que debe ser de todos.
Así que, yo espero que periódicamente podamos conversar sobre cómo va avanzado este proyecto, para que llegado el momento, reitero, México esté bien y esté a tiempo conectado en Internet 2, la primera gran red informática del tercer milenio.
¡Enhorabuena!