Actualmente se vuelve casi imprescindible que
cualquier empresa ya sea gubernamental, privada, educativa, y hasta
en nuestros hogares, haga uso de Internet para encontrar información,
realizar consultas y trámites gubernamentales, formar redes
de datos privadas o intranets, entre muchas otras acciones de comunicación.
Es en este ambiente tecnológico, donde
la telefonía empezó a tener mayor participación,
alejada en un principio por los altos costos de instalación
que implicaba tener dos infraestructuras totalmente independientes,
pero que eran necesarias para dar este tipo de servicio, aunado al
sensible desarrollo tecnológico de la industria, a veces era
necesario contratar el servicio telefónico y de datos a diferentes
proveedores.
Con el desarrollo de la tecnología de la
telefonía IP (Internet Protocol, por sus siglas en inglés),
como se le denomina a la telefonía por Internet, los recursos
se reducen a una sola infraestructura, equipo nativo de datos que
provee un servicio de voz. Así, se necesita sólo una
red, con la ventaja de mantener una calidad del servicio para ambas
aplicaciones.